CARÁCTER DE LOS HOMBRES EN LOS POSTREROS DÍAS

2 Timoteo 3

1 También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos.

2 Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos,

3 sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno,

4 traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios,

5 que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita.

6 Porque de éstos son los que se meten en las casas y llevan cautivas a las mujercillas cargadas de pecados, arrastradas por diversas concupiscencias.

7 Estas siempre están aprendiendo, y nunca pueden llegar al conocimiento de la verdad.

8 Y de la manera que Janes y Jambres resistieron a Moisés,(A) así también éstos resisten a la verdad; hombres corruptos de entendimiento, réprobos en cuanto a la fe.

9 Mas no irán más adelante; porque su insensatez será manifiesta a todos, como también lo fue la de aquéllos.

«PANDILLEROS» AUMENTAN SU OPERATIVIDAD EN TODA CENTRO AMÉRICA

También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos. Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios, que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita (2 Ti. 3:1-4)

En México y Centroamérica (principalmente en Guatemala, El Salvador y Honduras) operan entre 90 mil y 100 mil «pandilleros», la mayoría jóvenes marginados, muchos de ellos deportados desde Estados Unidos, según estimaciones oficiales.

Como revela un informe del diario salvadoreño El Diario de Hoy, la captura en El Salvador del «pandillero» de la 18, Manuel de Jesús Reyes Galvez, alias El Spaider, en diciembre del año anterior, confirmó a las autoridades del Centro Antipandillas Transnacional (CAT) que los mareros se están movilizando por toda la región centroamericana en los últimos años para cometer delitos de extorsión, homicidio, tráfico de armas, robo de carros y, en los últimos meses, el tráfico de drogas.

Al pandillero, de origen hondureño, lo acusan de escaparse de dos prisiones y participar en al menos 13 asesinatos. Es considerado cabecilla de la mara 18 y fue arrestado en una lujosa residencia de Santa Tecla, en La Libertad, con documentación salvadoreña a nombre de Jesús Bojórquez Pineda. Fuentes del CAT declararon que la MS es la estructura que más se está expandiendo en la región centroamericana.

A pesar que el Centro no tiene un dato actualizado de cuántos pandilleros delinquen en el país, porque se están reclutando a menores y otros que no se están tatuando, se maneja un dato aproximado de 16 mil miembros entre las dos pandillas en El Salvador.

Según los registros, el país que tiene más mareros en toda Centroamérica es Honduras, y El Salvador tiene más en prisión.

En efecto, diversas organizaciones de defensa de los Derechos Humanos en Honduras estiman que unos 2 mil niños, jóvenes y adultos de entre los 8 y 35 años, miembros de maras, han sido asesinados en los últimos cinco años.

En México y Centroamérica (principalmente en Guatemala, El Salvador y Honduras) operan entre 90 mil y 100 mil pandilleros, la mayoría jóvenes marginados, muchos de ellos deportados desde Estados Unidos, según estimaciones oficiales.

El Centro de Inteligencia Policial (CIP) de El Salvador ha detectado muchas formas de comunicación entre los cabecillas de las maras de Estados Unidos y El Salvador, entre estás conexiones vía telefónica y por Internet.

Fuentes policiales de Honduras detallaron que los pandilleros han incursionado con mayor fuerza en el tráfico de droga junto con cárteles de México.

Pandilleros de Nicaragua y Honduras delinquen en el delito de las armas de grueso calibre y robo de vehículos para movilizarse y desmantelarlos. Mareros de Guatemala están extorsionando desde ese país con la colaboración de pandilleros salvadoreños.

A ver si las iglesias evangélicas nos hacen el milagro de bajar el índice alarmante de las pandillas en C.A. En Guatemala, donde supuestamente el 60% de la población es evangélica, debería mostrar un decremento de estas pandillas…¿pero lo han logrado? Sólo las estadísticas nos pueden responder con claridad el efecto «evangelizador» en la zona!