UNA PROFECÍA PARA NUESTROS TIEMPOS: EL CASTIGO PARA LOS QUE DESTRUYEN LA TIERRA

Dice así en el libro de Apocalipsis:

Apocalipsis 11:18: Y se airaron las naciones, y tu ira ha venido, y el tiempo de juzgar a los muertos, y de dar el galardón a tus siervos los profetas, a los santos, y a los que temen tu nombre, a los pequeños y a los grandes, y de DESTRUIR a los que destruyen la tierra.

Observen ustedes, queridos amigos, que aquí se anuncia la destrucción de todos aquellos que destruyen la tierra. Sin duda, esta profecía no apuntaba al primer siglo, ni al segundo, ni al tercero, sino a nuestros tiempos.

Efectivamente, en estos últimos tiempos se puede decir que el hombre ha estado destruyendo la tierra vorazmente, desforestando los bosques, depredando la fauna, y contaminando el ambiente con gases tóxicos de fábricas y por químicos que desechan irresponsablemente las empresas mineras o metalúrgicas, contaminando así el aire, los ríos y los mares del planeta.

Sin duda lo profetizado por Juan ya es una realidad que se ha venido agravando aún más en estos últimos 50 años. ¡Cuánta razón tenía Juan al profetizar algo que en sus tiempos parecía una visión de un iluso, de un anciano decrépito que veía cosas que para sus coétanos no podrían darse jamás! Hoy es una realidad inobjetable…y la visión de Juan es la visión de Dios para nuestros tiempos finales. 

Los videos que presentamos a contuación ilustran este desastre global por acción del hombre: