LOS TESTIGOS DE JEHOVÁ NOS PRESENTAN A UN DIOS PARCIAL Y DESAMORADO

Los Testigos de Jehová dicen que el resto ungido son los actuales escogidos, y que por causa de ellos los días de la gran tribulación serán recortados. ¿Pero acaso Dios no se interesa por su supuesta clase terrenal, las «otras ovejas»?¿Por qué tendría Dios que recortar los días de la tribulación por causa de una clase restante ungida de TJ, que suman unos 10,000 individuos y no por millones de Testigos de Jehová que pertenecen a la supuesta clase terrenal u otras ovejas?¿Acaso no convertiría esta supuesta preferencia de Dios por los escogidos ungidos, en un Dios parcial y desamorado que no le interesa mucho a sus otras ovejas

EL PELIGRO DE PRETERISMO

El Preterismo es un tipo de postmilenialismo del más extremo. Esta postura sobre la segunda venida de Cristo establece que Cristo reina ya.

Hay dos tipos de preterismo: El Parcial y el Total:

1.- Preterismo parcial- Ellos establecen más o menos los mismo que el postmilenialismo. Establecen que la Iglesia está en su edad de oro, que la Iglesia va a controlar el gobierno, las artes, en fin, y que la tierra sólo va a ver a Cristo venir para llevar a la tierra a su reino eterno. Bueno, me pregunto ahora, ¿dónde dejarán la depravación moderna, el auge del homosexualismo, las guerras, etc, pues si Cristo ya encadenó al diablo, todo lo malo debió haber desaparecido, o al menos, menguado. Pero ellos creen que Cristo viene de nuevo de forma visible para llevar a la iglesia a su victoria final.

Esto lo conseguí de una página preterista.

Cita:

Para aquellos de ustedes que no están familiarizados con el debate sobre futurismo y preterismo, algunas definiciones son necesarias. Los futuristas creen que la mayoría de pasajes proféticos del Nuevo Testamento están aún por cumplirse. Un preterista sostiene que si un texto relativo al tiempo se encuentra adjunto a una profecía, entonces el cumplimiento de esa profecía se encuentra gobernado por la referencia de tiempo. Palabras como «cerca», «de aquí a poco», «pronto», «rápidamente», «un poco», «al alcance de la mano» son guías críticas al determinar el marco de tiempo de una profecía dada. Si estas palabras significan lo que significan dondequiera que se les encuentre en el Nuevo Testamento, entonces una mayoría de las profecías del Nuevo Testamento ya han sido cumplidas, así que el cumplimiento se encuentra en el pasado (la definición de preterismo).

Como ejemplo: Note Mateo 24:30: «E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días…» Un intérprete no puede mantener «que ciertos aspectos de la profecía de nuestro Señor en Mateo 24 fueron cumplidos en el año 70 d.C.» y algunos están aún por ser cumplidos porque los eventos que siguen a partir del verso 29 ocurren «inmediatamente después». Es un paquete de todo o nada debido a la presencia del verso 34. Si Ud. quiere representar la posición preterista parcial con claridad, entonces compare Escritura con Escritura. ¿Cómo usa la Biblia fraseología similar en sus diferentes partes? Esta es la clave interpretativa para entender la profecía.

Como ven, esta es parte de las cosas que ellos creen. Hasta ahora, pues, algunas cosas torcidas, pero ahora viene lo peor:

2. Preterismo total- Estos establecen que ya todo está cumplido, que Cristo vino en el 70, que Mateo 24 se aplicaba a la destrucción de Jerusalén en el 70, y que Apocalipsis se aplicaba a esto. Dicen que El Apocalipsis se escribió en el 66, y que hay unos escritos, de los cuales les pregunto dónde están, pues en esto soy como Santo Tomas, ver para creer, por favor.

El preterismo extremo es una postura peligrosa, pues pasa por alto Hechos 1.11. Y es que es evidente que a Cristo aún no se le ha visto venir de la MISMA FORMA en que se fue (de la Tierra a las nubes, y de las nubes al cielo, pero a la inversa). Bueno, en torno a Mateo 24, para esos días nadie decía que era el Cristo. La Biblia habla de estas cosas, en Tesalonicenses 5, que la Segunda Venida será como Ladrón en la noche, que nadie sabe cuándo viene el ladrón, es decir, no se estará preparado y que la gente común no lo esperara. Si miramos a Mateo 25, habla de las 10 vírgenes, un número que significa TOTALIDAD, pero dice que todas cabecearon, y todos sabemos que hoy se habla de la iglesia. Una de las formas de conocer que esto pasa hoy día es un resurgimiento de esto, pero a niveles extravagantes. Esta postura NIEGA LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO, DICE QUE YA VINO. Si alguien le vio, por favor avísenme, que yo no vi su nube aun venir-ver Hechos 1:9-11, Apocalipsis 1.7. Este solo verso saca al preterismo de una perspectiva bíblica sana, y entonces le pregunto al que cree en esto, ¿qué me dice de estos versos, y con 1ra Tesalonicenses 4.13-5.11?

En EU, algunos de los que creen esto son Earl Paulk, el Obispo de la Iglesia Chapel Hill en Atlanta, Georgia; en América Latina Rodolfo Font en Puerto Rico ha hecho que su concilio tome esta falsa postura y la haga parte de su fe [aún no está publicado en la net, pero no lo hacen público por que ya se les salieron 20 iglesias a nivel mundial cuando empezaron a predicar esto], y otras iglesias como Cristo Reina, del Obispo Pedro Torres. Es curioso decir que las iglesias que han tomado esto como doctrina son la mayoría de corte carismático, lo cual me preocupa a mí como [¿será que estamos perdiendo la visión por demasiado amor a la prosperidad?]. También esto lo creen algunos Presbiterianos del tipo Ortodoxo Reformado [son bien poquitos, pero bien poquitos, en PR sólo hay una iglesia y es bien chiquitita, es una iglesia que envejece, no crece], y los de Creciendo en Gracia creen esto.

El Hno Flavio Arrue dice sobre esta peligrosa secta:

Cita:

Esta GENERACIÓN» (MATEO 24:34) ¿DÓNDE ESTÁ EL FATAL ERROR DEL PRETERISMO?

El mal del Preterismo pretende hacernos creer que todas las profecías fueron cumplidas en Jerusalén en el año 70 D.C., y se basa en una interpretación errónea y no bíblica de Mateo 24:34.

«De cierto os digo, que de ningún modo pasará ESTA GENERACIÓN hasta que todo esto acontezca».

Oigamos con cuidado lo que el Señor les dice a sus discípulos.
GENERACIÓN (del griego «genea»), puede significar un «período de vida». Pero no es éste su sentido primario ni tampoco aquel en que el Señor lo usa aquí. El contexto nos ha de guiar para entender el término, como siempre. Es sano quien sigue el contexto, y tuerce la Palabra quien desecha el contexto y atribuye significados a las palabras según el antojo privado.

1) Significado cronológico: Un «período de vida» puede estar implicado en GENEA en, por ejemplo, una genealogía (como en Mateo 1:1 ), o cuando el contexto lo requiere (como en Lucas 1)..

2) Significado moral: Cuando GENEA se usa en las escrituras proféticas (Salmos, etc.), NUNCA tiene este sentido de «período». Así pues, el significado en las profecías, es más bien MORAL que cronológico, como por ejemplo en el Salmo 12:7:

«Tú, Jehová, los guardarás; de esta generación los preservarás para siempre»

Las palabras «para siempre» prueban una fuerza prolongada. Por ende, el pasaje indica que Jehová preservará a los piadosos de sus malvados e inicuos opresores (v. 2-5): de «esta generación para siempre». Ésta es la clara y conclusiva refutación de aquellos que pretenden limitar la frase a una breve época o al período de vida de un hombre. 

En Deuteronomio 32:5, 20 encontramos el término GENERACIÓN empleada en similar sentido, es decir, no para transmitir un período, sino para expresar las CARACTERÍSTICAS MORALES DE ISRAEL: 

«Generación torcida y perversa.» «Porque son una generación perversa» 

En los Salmos, de nuevo, no sólo tenemos «esta generación», sino también «la generación venidera», y jamás se limita a una mero término de 30 o de 100 años (compárese también Proverbios 30 ).

 USO DEL TÉRMINO GENERACIÓN EN LOS EVANGELIOS SINÓPTICOS 

Lo que torna todo más claro y simple es el uso del término en los Evangelios Sinópticos. El contexto más inmediato en que se usa el término GENEA nos dará la clave para su exacta comprensión. En Mateo 11:16 leemos: 

«Mas ¿a qué compararé esta generación?». Aquí se tiene en cuenta a aquellos que vivían entonces, caracterizados por el capricho moral que los ponía en oposición al testimonio de Dios en justicia o en gracia. Pero es evidente que si bien lo primario que se tiene en cuenta es la gente que vivía entonces, la identidad moral de las mismas características pueden extenderse por tiempo indefinido, y así de edad en edad puede tratarse perfectamente de «esta generación» en carácter. Para confirmación de lo dicho comparemos estas Escrituras: 

Mateo 12:39, 41, 42 y 45: 

«Él respondió y les dijo: La generación mala y adúltera demand señal…» (v. 39) 

«Los hombres de Nínive se levantarán en el juicio con esta generación, y la condenarán…» (v. 41) 

«Así también acontecerá a esta mala generación» (v. 45), etc. 

El versículo 45 muestra claramente la unidad de la «generación» en su juicio final (que todavía no se ha agotado) con la que emergió de la cautividad babilónica. 

Asimismo, observemos Mateo 23:36:

 «De cierto os digo que todo esto vendrá sobre esta generación» 

Esta generación no pasará hasta que todas las predicciones de juicio, etc. que Cristo anunció se hayan cumplido. Es claro por el discurso profético de Cristo que la mayor parte de lo anunciado, aún queda por cumplirse, y «esta generación» todavía subsiste, y habrá de subsistir hasta que todo se cumpla. 

Y es una evidente realidad que allí están los judíos. Pero el punto no es tanto que se trata de una raza en la dispersión (aunque algunos están en la tierra de Palestina) que se ha perpetuado a lo largo del tiempo, sino que se trata DE LA MISMA RAZA CON LA MISMA CARACTERÍSTICA MORAL: la misma incredulidad, el odio y el rechazo por Jesús, su propio Mesías, que les caracterizaba el día que él pronunciaba su sentencia. Todas estas cosas, advertía el Señor acerca de sus penas más tempranas, así como de sus más tardías, deben suceder antes que esa perversa generación desaparezca. 

Espero que, siguiendo la regla del contexto, hayamos llegado a un entendimiento claro de lo que significa «generación» en la doctrina de Cristo, y poder estar alertas contra los engaños del «Preterismo» (que nos priva de la esperanza bienaventurada del retorno del Señor)
EL PRETERISMO TOTAL ¿Niega verdades fundamentales? 

Sin entrar en detalles exegéticos, me limité a la definición bíblica del término «generación», y demostré contextualmente que este término no se limita al período de vida de un hombre, como pretende el preterismo extremo. El «viejo Israel», que rechazó al Mesías en incredulidad, hasta HOY, es «esta generación», es decir, una «clase moral». La «generación venidera», en cambio, es la que heredará el Reino (Salmo 102:18 y 22:30). Es el «nuevo Israel» que nacerá en un día (Isaías 66: cuando el Libertador quite la impiedad de Jacob ( «esta generación» ) y «todo Israel» será salvo (Romanos 11:26 ). Tales son los caminos de Dios. Pero para aquellos que no están tan familiarizados con el Preterismo, quisiera hacer una breve introducción sobre lo que es y sobre lo que implica.

INTRODUCCIÓN AL PRETERISMO 

Preterismo significa PASADO, y se refiere a considerar las profecías bíblicas como ya cumplidas (muchas profecías que los no preteristas creemos que habrán de cumplirse en el FUTURO ).

Hay dos clases de Preterismo diferentes: El Preterismo parcial y el Preterismo total.

 El preterista parcial ve que el año 70 D.C. involucró lo siguiente: 

  1. Una venida de Cristo
    2. Un día del Señor
    3. Un juicio, y
    4. El fin de la edad judía

Sin embargo, hay que aclarar que los Preteristas parciales admiten que hay una segunda venida de Cristo, el arrebatamiento, una resurrección corporal, el día del Señor y el juicio final (véase R.C.Sproul, The Last days According to Jesus, Grand Rapid, Baker Books, p. 170, 199 ), al margen del significado que ellos le asignen a estas expresiones. Pero aclaremos que ellos creen en una resurrección física del cuerpo.

Los Preteristas totales 

Ellos dicen que la ÚNICA venida del Señor que existe, es la que tuvo lugar en el año 70 D.C. O sea que, en el año 70 D.C. tuvo lugar:

1. La venida del Señor

2. La resurrección

3. Los cielos nuevos y la nueva tierra

Los Preteristas totales focalizan su sistema en el año 70 D.C. diciendo que TODO se cumplió en él. Es más, en el año 70 D.C también, alegan que, constituye el punto terminal de la obra expiatoria de Cristo.

Y aquí espero que los hermanos vean todo lo absurdo de este falso esquema. Pues lo llamativo y delicado de sistema preterista es que lleva involucrado, y requiere en su esquema, el solemne asunto de varias falsas doctrinas fundamentales.

La palabra «escatología» (que se refiere a las doctrinas que tienen que ver con las cosas finales ), es usada en el Preterismo de varias maneras para designar el sistema: Escatología realizada, escatología del pacto y escatología cumplida. Además de estas designaciones, el sistema es a veces referido como:

Preterismo consistente, preterismo total, y, doctrina del 70 DC. Yo me refiero a menudo al término «Preterismo total» (full Preterism)cuando hablo del sistema preterista. Implicancias del esquema preterista sobre la fe.

Pero el punto importante a tener en cuenta, es que el Preterismo total ESTÁ ASOCIADO A FALSAS DOCTRINAS FUNDAMENTALES, QUE INCLUYEN LA NEGACIÓN DE LA RESURRECCIÓN DEL CUERPO. Y por eso debemos estar alertas contra esto. (Para quienes quieran tener una introducción muy didáctica y completa de la posición Preterista total, le recomiendo la obra What is the Preterist View? por Ed. Stevens ).

Decir que la Segunda venida de Cristo tuvo lugar ya en el año 70 D.C. durante la destrucción de Jerusalén, y que a partir de allí la gloria prometida ya ha sido cumplida, y que ahora reinamos con Cristo en la tierra, habiéndose cumplido TODAS las profecías, es un golpe mortal al cristianismo en lo doctrinal y en lo práctico, el cual queda totalmente anulado por semejante esquema falso.

Pues el NT nos contempla en nuestra marcha y en nuestra adoración en vista de la bendita presencia (parousia) de Cristo para recibirnos hacia él glorificados, a la casa del Padre (Juan 14:3 ). Con este esquema, no sólo los Evangelios dejan de aplicarse, sino también las Epístolas, y ni qué hablar del Apocalipsis. Pues el NT nos exhorta incuestionablemente a seguir una senda de padecimientos, tanto por causa de la justicia como por causa del Nombre de Cristo, en medio de un mundo totalmente hostil a Él y a su Reino. Cuando él realmente aparezca, Dios dará lugar a sus solemnes juicios, de modo que el mundo aprenderá la justicia, especialmente debido a que Satanás no podrá entonces seguir engañando. En breve, el enemigo ha engañado a estos visionarios llevándolos a una entera abolición de la condición y los deberes de los creyentes sobre los cuales la Biblia insiste «hasta aquel día», cuando todas las cosas serán hechas nuevas, al margen de cuán cierto es esto ahora para nuestra fe y para nuestra esperanza, pues entonces lo será de hecho y para todo ojo.

La Biblia hace fijar nuestros ojos en la suprema esperanza de ser como Cristo cuando le veamos «tal como Él es» (1 Juan 3:2 ), lo cual NO sucedió, por cierto, cuando cayó Jerusalén en el 70 DC. éste no es sino el fantástico e impío sueño de la escuela Preterista total (aunque nadie niega el hecho histórico, que tuvo lugar por la providencia y el gobierno de Dios).

Espero que tengamos con esto aunque sea nociones introductorias de lo que es y de lo que implica el sistema Preterista, y estemos alerta. Podemos ver que los Preteristas ya existían en la época apostólica: Himeneo y Fileto.Y el apóstol ordena a Timoteo a limpiarse de ellos «cuyo mal carcomerá como gangrena» y quienes «trastornaban la fe de los santos, diciendo que la resurrección ya se efectuó» (2 Timoteo 2:14-23 ).

«Aguardando la esperanza bienaventurada» (Tito 2:13 )

Flavio H. Arrué


 

ISAÍAS 61:1-11: UNA PROFECÍA QUE JESÚS CUMPLIÓ SÓLO EN PARTE EN SU PRIMERA APARICIÓN PERO QUE TERMINARÁ POR CUMPLIRSE TOTALMENTE EN SU SEGUNDA VENIDA EN GLORIA

Por Ing. Mario A Olcese (Apologista)

 

Las noticias de hoy no son del todo alegres o alentadoras, salvo muy raras excepciones. Los periódicos que más se venden hoy son aquellos que anuncian o publican noticias alarmantes y preocupantes, pues éstas abundan más que las buenas. Todos, sin duda, estamos hartos de leer y de oír noticias que son desalentadoras en lo que respecta a lo económico, a lo social, a lo moral, y al medio ambiente. Se habla de que el mundo está superpoblado, y que el hambre pulula en muchos países del “tercer mundo”. También oímos frecuentemente de enfermedades incurables, desnutrición, aumento galopante del desempleo, hogares cada vez más divididos, delincuencia de adolescentes y jóvenes, abortos, inundaciones, terremotos, ríos contaminados, gentes sin hogar, insalubridad, guerras, terrorismo, drogadicción, racismo, homosexualidad y toda suerte de perversiones, cultos satánicos, sectas alienantes, etc.

 

No obstante, muchas personas aún ignoran que Cristo trajo un anuncio feliz para todas sus criaturas inteligentes del planeta tierra, el cual redundaría en una vida feliz y abundante. Jesús Dijo: “Yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia”(Juan 10:10). Es decir, Jesús vino para darnos una vida feliz y abundante con su presencia y su buena nueva. El profeta Isaías profetizó la presencia benefactora de Jesús con estas palabras: “El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, a los presos apertura de la cárcel; a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de venganza de nuestro Dios; a consolar a los enlutados; a ordenar que a los afligidos de Sión se les dé gloria en lugar de ceniza, óleo de gozo en lugar de luto, manto de alegría en lugar de espíritu angustiado; y serán llamados árboles de justicia, plantío de Jehová, para gloria suya. Reedificarán las ruinas antiguas, y levantarán los asolamientos primeros, y restaurarán las ciudades arruinadas, y los escombros de muchas generaciones. Y extranjeros apacentarán vuestras ovejas, y los extraños serán vuestros labradores y vuestros viñadores. Y vosotros seréis llamados sacerdotes de Jehová, ministros de nuestro Dios seréis llamados; comeréis las riquezas de las naciones, y con su gloria seréis sublimes. En lugar de vuestra doble confusión y de vuestra deshonra, os alabarán en sus heredades; por lo cual en sus tierras poseerán doble honra, y tendrán perpetuo gozo. Porque yo Jehová soy amante del derecho, aborrecedor del latrocinio para holocausto; por tanto, afirmaré en verdad su obra, y haré con ellos pacto perpetuo. Y la descendencia de ellos será conocida entre las naciones, y sus renuevos en medio de los pueblos; todos los que los vieren, reconocerán que son linaje bendito de Jehová. En gran manera me gozaré en Jehová, mi alma se alegrará en mi Dios; porque me vistió con vestiduras de salvación, me rodeó de manto de justicia, como a novio me atavió, y como a novia adornada con sus joyas. Porque como la tierra produce su renuevo, y como el huerto hace brotar su semilla, así Jehová el Señor hará brotar justicia y alabanza delante de todas las naciones” (Isaías 61:1-3).

 

Ahora bien, nótese que el profeta Isaías predice varias cosas interesantes que Jesús cumpliría no sólo en su primera venida como hombre mortal, sino también en su segunda venida en gloria como hombre inmortal. Así pues hay una primera parte ya cumplida, y una Segunda parte que está aún pendiente por cumplirse. Es muy fácil descubrir qué parte de esta profecía cumplió Jesús en su primera venida y qué parte aún no. Y para saberlo sólo basta con leer en qué en parte Jesús se detuvo en la lectura de esta profecía en la sinagoga,  y que Jesús subrayó que vino a cumplir. Dice la Biblia así: “Vino (Jesús) a Nazaret donde se había criado; y en el día de reposo entró en la sinagoga, conforme a su costumbre, y se levantó a leer. Y se le dio el libro del profeta Isaías; y habiendo abierto el libro, halló el lugar donde estaba escrito: “El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; me ha enviado o a sanar a los quebrantados de corazón; a pregonar libertad a los cautivos, y vista a los ciegos; a poner en libertad a los oprimidos; a predicar el año agradable del Señor. Y ENROLLANDO EL LIBRO, LO DIO AL MINISTRO, Y SE SENTÓ” (Lucas 4:16-19).

 

Tome nota, amigo lector, que Cristo abrió el libro del profeta Isaías Capítulo 61 en la misma sinagoga Judía. Y ya sabemos que Isaías fue un profeta de Dios que vivió muchos siglos antes que Jesús naciera de María virgen.  Ahora bien, El capítulo 61 del profeta Isaías habla de la venida del Mesías o del Cristo, y por tanto, era crucial para Jesucristo leerlo, pues hacía clara referencia de él mismo y de su misión en la tierra. Ahora bien, nótese que el capítulo 61 de Isaías tiene 11 versículos, y no obstante Jesús, al leer ese capítulo 61 en la sinagoga judía, sólo lee el versículo 1 y la mitad del 2. El versículo 2 en su segunda mitad, y los versículos 3 al 11 él no los leyó, y sólo se limitó a enrollar el libro y dárselo al ministro, para luego tomar su asiento. La pregunta surge inmediatamente: ¿Por qué Cristo no leyó todo el capítulo 61 de Isaías, y sus 11 versículos, si hacían referencia a él y a su obra en la tierra?— ¡Usted necesita comprenderlo claramente!

 

UNA PROFECÍA CUMPLIDA Y POR CUMPLIRSE:

 

Todo el capítulo 61 de Isaías habla sobre Cristo y su obra en la tierra. Sin embargo este capítulo nos habla de una obra mesiánica que sería realizada dos fases o etapas separadas por un periodo largo de tiempo. Una primera parte (versos 1 y la mitad del 2) que se cumplió con la primera venida de Cristo, y una segunda parte (verso 2, en su segunda mitad, hasta el verso 11) que se cumplirá con la segunda venida de Cristo en gloria con todos sus santos ángeles.

 

Veamos qué es lo que Cristo cumplió en su primera venida, y luego lo que cumplirá en su segunda venida:

 

Lo Cumplido en su Primera Venida:

 

a.-  Me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos (Isaías 61:1).

 

Sí, Jesús fue enviado hace dos milenios para predicar buenas nuevas a los abatidos. Esto concuerda con lo dicho por Jesús mismo en Lucas 4:43: “Pero él (Jesús) les dijo: Es necesario que también a otras ciudades anuncie el evangelio (buenas nuevas) del reino de Dios; porque para esto he sido enviado”. De modo que Cristo vino al mundo para predicar el evangelio (“buenas nuevas”) del Reino de Dios a los abatidos, a fin de darles esperanza y salvación eternas. Por eso, los eruditos en Biblia concuerdan que el tema central del mensaje de Cristo es el evangelio del reino de Dios. Este reino de Dios era un anuncio de liberación de los abatidos. Recordemos que Jesús sostuvo que todo aquel que creyera en su evangelio sería redimido, salvado y liberado. Dice en Marcos 16:15,16 lo siguiente: “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura, el que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado”.

 

Si amigo lector, Jesús vino con un mensaje salvador el cual se llama: “El evangelio del reino de Dios”. Sin embargo, este evangelio singular o único ha sido pasado por alto por la mayoría de los llamados cristianos, y es ignorado totalmente por los mismos “cristianos”, pues el diablo ha obscurecido las mentes de los hombres, aún de los que se dicen ser ministros de Jesús. 

 

Pero recuerde que sólo hay un evangelio en la Biblia (Gálatas 1:6-9), y ése es el correctamente llamado: “El evangelio del Reino de Dios”. El “reino de Dios” es, pues, el evangelio o buenas noticias de Jesucristo para los abatidos de la tierra. Él predicó siempre el reino de Dios desde el inicio (Marcos 1:1,14,15) y el  final de su ministerio (Hechos 1:3).

 

Usted no encontrará que Cristo prometiera una estadía eterna de los justos en el cielo, sino la entrada a algo que él llamó: El Reino de Dios. A Nicodemo, un fariseo de renombre, Jesús le dijo que podría ver y entrar al reino de Dios si “nacía de nuevo” (Juan 3:3,5). Entonces el reino de Dios es algo que se puede ver y entrar si se nace de nuevo, espiritualmente hablando. En todo caso, el prerrequisito fundamental para ver y entrar al reino era (…y es) CREER en Cristo y en su Reino, por la fe.

 

b). “A vendar a los quebrantados de corazón” (Isaías 61:1):

 

Muchos hombres están afligidos en su corazón por la pérdida de un amigo, un hijo, una esposa, una madre, un hermano, etc. Otros están afligidos por enfermedades, por el hambre, por la desesperanza, por las injusticias, por las guerras, y cosas como éstas. Entonces Jesús aparece en el mundo para curar las heridas de los hombres, dándoles esperanza y sanidad para sus vidas. Jesús vino a salvar a los hombres de su situación caída, de su conciencia sucia, de sus frustraciones, de sus enfermedades, de sus pecados más negros, y les da una salida concreta a todos sus males. Él les prometió una vida presente de gozo y esperanza, y una futura existencia eterna de la era venidera mucho más gloriosa y preciosa aún (Juan 10:10, Romanos 8:18).

 

El mensaje del reino de Dios vino a ser bien recibido por los pobres sufrientes que tenían el corazón quebrantado por las tristezas y frustraciones de la vida, es decir, los pobres en espíritu que reconocían su necesidad espiritual, esto es, todos los hambrientos de Dios.

 

c).- A Pregonar libertad a los cautivos, a los presos apertura de la cárcel” (Isa. 61:1).

 

Aquí Jesús se refiere más que nada a los presos en sus pecados y delitos. Sí, muchos hombres están presos en SUS PECADOS, y son como esclavos de sus vicios. Estos se encuentran con las ataduras diabólicas que los convierten en prisioneros de sus pecados. Jesús habló de que los pecadores son esclavos o presos de sus vicios carnales, de los cuales no se pueden liberar por sí mismos. Por eso Jesús dijo: “Si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres” (Juan 8:36). Y, ¿cómo se logra esto? Cuatro versículos antes (32) Jesús dice que “la verdad os hará libres”. Sí, Jesús vino descubrir la realidad del pecado, y de cómo éste opera. También enseñó a cómo evitarlo eficazmente al descubrir y neutralizar las tácticas satánicas.

 

Pero también Jesús enseñó que debemos visitar a los presos y los maltratados a fin de darles esperanza con el mensaje del evangelio. San Pablo es enfático cuando dice: “Acordaos de los presos, como si estuvieseis presos juntamente con ellos; y de los maltratados…” (Hebreos 13:3). Y es que el evangelio o mensaje de Cristo hace libre al hombre, aunque esté detrás de las rejas. Hay libertad y paz cuando se obtiene el perdón de Dios por los delitos o pecados cometidos contra Él.

 

d). “A proclamar el año de la buena voluntad de Jehová” (Isaías 61:2ª):

 

La primera venida de Cristo trajo la proclama de la salvación de Dios a favor de los pecadores. Su venida traía nuevas ilusiones de un mundo mejor para judíos y gentiles por igual, si aceptaban la verdad personificada en Cristo y su evangelio del reino. Con la venida de Cristo, y  el inicio de su ministerio, él abrió el camino que conduce al reino venidero, y preparó a los elegidos para participar de esa era maravillosa de justicia en la tierra. Su venida sirvió para definitivamente condenar al diablo, y a su reino de maldad. Su misión fue “trasladar” a los pecadores, del reino tenebroso del diablo, a la luz del reino de Dios por la fe (Colosenses 1:13,14).

 

Definitivamente con la venida de Cristo se iniciaba el proceso de redención del hombre, sin importar raza, sexo, educación, nacionalidad, o religión. Jesús vino a salvar a todos los hombres, aunque también es verdad que pocos lograrían ganarla. Jesús exigía la renunciación de los hombres a las cosas temporales para seguirlo a él y a su causa redentora. La iglesia, compuesta por los salvos de todas las naciones, tiene la obligación y el mandato de seguir proclamando ese mismo mensaje de la buena nueva del reino a todas las naciones (Mt. 24:14). Los salvados deben ahora salvar a otros con el mensaje de Cristo, o sea, a través del anuncio del evangelio del reino de Dios (Mateo 24:14; Marcos 16:15,16).

 

Hasta este punto se trataba la primera venida de nuestro Señor al mundo, vale decir, el de preparar a sus elegidos (su iglesia) para que reinen con él en su reino o gobierno milenario en la tierra (Apocalipsis 2:26,27; 3:21;20:4,5). Su mensaje fue siempre el reino de Dios. Esta proclamación es la meta de la carrera cristiana la cual Jesús selló o certificó con su propio sacrificio vicario y su resurrección gloriosa de entre los muertos (Hechos 14:22; 2 Pedro 1:5-11; Santiago 2:5; Mateo 25:31,34).

 

La Segunda Parte de la Misión de Cristo Aún no Cumplida sino hasta su Retorno: (Isaías 61:2-11)

 

La segunda parte de la profecía se proyecta hacia el futuro, cuando Jesús vuelva a esta tierra por segunda vez en persona. Los versículos 2 al 11 nos dan detalles interesantes de lo que ocurrirá cuando el Señor Jesucristo vuelva nuevamente a la tierra y reine en Israel:

 

1.- El día de la venganza de Dios.

2.- A consolar a los enlutados.

3.-  Gloria y gozo a los afligidos de Sión.

4.- Se reedificarán las ruinas antiguas.

5.- Se restaurarán las ciudades arruinadas.

6.- Extranjeros apacentarán los rebaños.

7.- Los Judíos comerán las riquezas de las naciones.

8.- Dios hará pacto perpetuo con su pueblo.

9.- Pueblos reconocerán que Israel es escogido.

10.-Israel será prominente sobre las demás naciones.

 

Aquí tenemos unas profecías concernientes al pueblo Hebreo, o también llamado: el pueblo escogido de Dios. Jesús vendrá para vengar la incredulidad de los hombres impíos, es decir, vendrá a castigar a aquellos que no quisieron saber nada de él y de su Padre, y descuidaron una salvación tan grande. Además, cuando Jesús regrese nuevamente a este mundo, las naciones querrán borrar del mapa a la nación Judía asentada en la tierra santa. Multitud de naciones árabes y de otros países se pondrán de acuerdo para combatir contra el pueblo elegido de Dios, y entonces, cuando menos se lo esperen, serán castigados con la gloriosa venida del Señor.

 

Por fin los judíos no serán más amenazados por sus enemigos y vecinos, y los enlutados, aquellos que perdieron a sus hijos en batalla, por el terrorismo y por el holocausto, serán consolados. Los afligidos de Sión tendrán gloria y gozo de verdad, al verse finalmente liberados completamente de sus enemigos y por tener a su rey poderoso entre ellos.

 

Para ese entonces las ruinas antiguas que ahora existen en Israel, y aquellas que se produzcan por causa de los ataques enemigos sobre la tierra santa, serán reedificadas. Ahora serán los extranjeros los que se encargarán de sembrar las tierras y a apacentar los rebaños judíos. Las naciones gentiles estarán al servicio de Israel, e Israel será de bendición para ellas. El mundo reconocerá que Israel es una nación de Dios, elegida y preciosa. Además, con el reino de Cristo desde Jerusalén, los hombres recibirán las leyes de Dios, y ellos tendrán que andar rectamente, de lo contrario les sobrevendrán las calamidades de Dios (Leer Zacarías 14).

 

Por fin los judíos vivirán seguros y en paz, porque Cristo y su iglesia tomarán el control del mundo desde Jerusalén. En ese tiempo las armas de guerra serán destruidas, y los ejércitos dejarán de existir. Habrá un desarme mundial nunca antes visto.

 

Una Ignorancia Generalizada:

 

Es triste contemplar cómo el mundo se opone a Israel y a sus legítimos derechos sobre la tierra prometida. Existe una animadversión tremenda hacia los judíos en todas partes del mundo, incluso dentro del mundo llamado “cristiano”. Por muchísimos siglos los católicos han alimentado el odio hacia los judíos, y han pasado por alto las Escrituras bíblicas que afirman tajantemente que este pueblo milenario es y seguirá siendo el pueblo elegido de Dios (Romanos 9:4;11:1,2). También los más de los cristianos se han olvidado que Jesús mismo dijo que la salvación viene de los judíos (Juan 4:22), afirmación ésta que resultaría absurda si en verdad este pueblo fue desechado para siempre por Dios.

 

Los que se dicen Cristianos ignoran que el retorno de los judíos en su tierra, el 12 de Mayo de 1948, se produjo como respuesta a una promesa explícita de Dios a Abraham, en el sentido que su descendencia heredaría la “tierra prometida” (Génesis 13:15; 15:18). Por cierto que esa descendencia se refería primeramente a Cristo, a los judíos cristianos de todas las épocas, y finalmente a los no judíos cristianos, hechos “judíos espirituales” por la fe en Cristo (Gálatas 3:16,29).

 

Ahora que la tierra de la promesa se encuentra en manos judías (aunque aún faltan recuperar ciertos territorios que comprendían la antigua tierra de la promesa), y habiendo sido Jerusalén reconquistada por los Hebreos en Junio de 1967, sólo queda esperar por la venida de Cristo para que cumpla las promesas de Isaías 61:2b-11). Cuando eso ocurra, Israel será de bendición para los pueblos de la tierra. Esto significará que habrá un solo gobierno mundial liderado por Jesucristo, el Rey de los reyes, y el Señor de los señores.