¡DOS SOCIOS INSEPARABLES DEBAJO DEL MAR!

Seeing eye fish

Escuchar

Salmo 9:01 b

«Te alabaré, oh Jehová, con todo mi corazón; Contaré todas tus maravillas.  

Hay un viejo dicho de que la gente rara vez recuerda la rapidez con que el trabajo estaba hecho, pero se dan cuenta de un buen acabado. Sin embargo, la asombrosa variedad y cantidad de las cosas creadas por Dios no limitó la elegancia de su mano de obra fina. 

La relación entre el camarón pistola y un pez llamado gobio es un buen ejemplo de la atención del Creador hasta el más mínimo detalle. El camarón pistola tiene la vista muy mala, mientras que el gobio tiene una vista excelente. Ambos comparten la misma madriguera, que ES excavada por el camarón y custodiada por el gobio.

El camarón utiliza el gobio como una persona ciega utiliza un perro lazarillo. Cada vez que el camarón se encuentra fuera de su madriguera, siempre mantiene una antena en el gobio. El camarón permanece se oculta dentro de la madriguera, si el gobio debe nadar temporalmente. Cuando se acerca el peligro, el gobio da señales y desaparece dentro de la madriguera. El camarón está justo detrás de él.

Ni el gobio, ni los camarones pueden sobrevivir el uno sin el otro, por lo que se establecen para la vida cuando ambos gobio y el camarón son muy jóvenes. Para que este sistema funcione, los sistemas reproductivos tanto el gobio y el camarón, que son muy diferentes, se sincronizan para que el joven camarón y el joven gobio estén listos para reproducirse al mismo tiempo.

Esta relación sorprendente nos muestra cómo las normas de excelencia de nuestro Creador llevar su amor a todos los rincones de la creación.

La oración: 

Padre celestial, como dice tu Palabra: Tú has hecho todas las cosas muy bien. Te doy gracias por la tranquilidad de saber que nada en la creación es demasiado insignificante para tu atención amorosa. En el Nombre de Jesús. Amén. 

Notas: 

Yanagisawa, Y. 1990. «Amigos extraños en el fondo del mar.» Historia Natural, agosto p. 46.

www.elevangeliodelreino.com

 

Deja un comentario