¿QUÉ EVANGELIO LE ESTÁ PREDICANDO A USTED EL PASTOR DE SU IGLESIA?

Por Ing° Mario A Olcese (Apologista) 

 ¿Qué evangelio ha creído usted para su salvación?¿Esta usted 100% seguro de que usted creyó en el evangelio salvador de labios de su pastor o predicador cuando usted se decidió a «recibir a Cristo»? Le pregunto esto porque sinceramente me resulta trágico que los más de los que asisten a las iglesias no se pregunten si lo que enseñan sus Pastores como «el evangelio salvador» es en realidad el mismo evangelio que enseñaron Jesucristo y sus discípulos a sus audiencias del primer siglo. Esta pregunta es vital, porque Jesús vino a predicar un mensaje singular y divino que conduce a la vida eterna (Juan 6:68). Este mensaje es el evangelio del reino o las buenas nuevas de la gracia (Rom. 1:16; Hechos 20:24,25), el cual nuestro Señor espera que creamos para ser salvos (Marcos 16:15,16).

Sí, mis amigos, el evangelio verdadero salva al que lo cree de todo corazón. ¿Pero qué sucede cuando alguien cree en un falso mensaje o en un evangelio trucado? ¿Podrá acaso esa fe en un evangelio adulterado, salvarle? Pablo fue enfático al decir: Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente. No que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren pervertir el evangelio de Cristo. Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema. Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema (Gál. 1:6-9). Así que el asunto de resguardar el evangelio original es de vital importancia para nosotros, y todo aquel que lo trastoque con evangelios espurios, son ANATEMAS o MALDITOS.

Hoy estamos repletos de predicadores malditos, de siervos desleales que predican evangelios de demonios que los conducirán inexorablemente a la ruina total, y a todos los incautos que los aceptan como verdaderos.

Parece que los Bereanos modernos escasean en las iglesias, me refiero a los creyentes que deben ser fieles y serios, y que deben ceñirse escrupulosamente a la Palabra revelada. Hoy, los “creyentes” contemporáneos están buscando mensajes agradables a sus oídos, buenas nuevas que les ofrezcan inmediatamente grandes bendiciones materiales, comodidad, y una vida pacífica y sin problemas de ningún tipo. Este tipo de mensajes son los que más atraen a las masas que buscan escapar automáticamente de sus miserias, o de sus actuales frustraciones, y que no están dispuestas a esperar hasta la venida de Cristo para ver sus más caros anhelos hechos realidad. Estos individuos no quieren primero someterse a las exigencias radicales del Señor para la vida presente, antes de recibir las bendiciones futuras prometidas por el Señor. Dice Pablo de éstos: Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas. Pero tú sé sobrio en todo, soporta las aflicciones, haz obra de evangelista, cumple tu ministerio” (2 Tim. 4:3-5). Aquí habla Pablo de personas que no tendrán interés por la sana doctrina, sino por los mensajes que alimenten sus liviandades. Estas personas desean oír promesas que aticen sus avaricias, y sus deseos carnales, y no las verdaderas bendiciones espirituales imperecederas. Así, pues, millones son engañados a través de evangelios diabólicos predicados por los evangelistas de la prosperidad, o los del reino ahora.

Deténgase a pensar

Es hora de que usted haga una pausa y reflexione con la Biblia en la mano si lo que enseña su pastor favorito en su iglesia,  o en algún programa religioso de TV, es Escritural o no. No es sabio que usted acepte automáticamente todo lo que se le dice sin antes verificarlo con la Biblia. Sólo  cuando usted proceda tal como le estoy diciendo, usted se llevará la gran sorpresa de su vida al descubrir que un alto porcentaje de los mensajes que se predican hoy, jamás fueron proclamados por Jesús o cualquiera de sus apóstoles en el primer siglo. El mensaje central de Cristo que giró alrededor de su reino, y que más tarde se le sumó su muerte, sepultura, y resurrección al tercer día, no ocupa el primer lugar en los sermones centrales de las iglesias. De hecho, el reino de Dios no es el tema central de los sermones de hoy, y ni siquiera es lo primero que buscan los cristianos contemporáneos, a pesar de que Jesús nos mandó a buscarlo primeramente antes que cualquier otra cosa (Mateo 6:33). ¿Qué ha pasado con el evangelio original? ¡Simplemente no es atrayente ni “comercial” para atraer a conversos! La gente quiere vivir un reino ahora, y no en un reino utópico del futuro.

La verdad es que los predicadores fraudulentos de hoy no pueden ofrecer un reino glorioso venidero porque el reino glorioso de ellos lo quieren vivir ahora, siendo como príncipes reales, llenos de riquezas y comodidades de ensueño. Ellos te dicen que tú puedes ser un príncipe en esta vida si “siembras tu semilla” fielmente. Para los evangelistas ricos sería una incongruencia ofrecerles a sus oyentes la gloria y las riquezas futuras del reino mesiánico, si las pueden vivir ahora y en abundancia a través de sus «fórmulas mágicas». Esta es la razón por la cual el evangelio original ha sido convenientemente sustituido por un evangelio de la prosperidad para todos hoy. Es la misma creencia equivocada que tuvieron algunos cristianos del siglo I, quienes suponían que ya estaban viviendo en el reino como reyes poderosos y ricos (1 Cor. 4:8).

¿Riquezas, hoy?

Personalmente me asombro al escuchar a los predicadores de los Estados Unidos y de los países latinos (mimos de los gringos) predicar el mismo evangelio de la prosperidad, “made in USA”, haciéndose muy ricos a costa de los “sembradores” ingenuos y avariciosos, los cuales, con el cuento de la semilla sembrada, se quedan más pobres y más endeudados que nunca. Estas son gentes que creen que Dios las llamó para ser ricas, ya que suponen que la pobreza es una maldición que reciben los infieles y no los fieles. Sin embargo,  esta personas no se dan cuenta de que son muchas veces los ricos y poderosos de este mundo los más miserables, viciosos, e impíos que existen en la tierra. El dinero en exceso se puede convertir en una verdadera maldición, y esto no lo dicen los predicadores de la prosperidad porque no les conviene.  Recuerde,  Jesús dice: «El engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se hace infructuosa» (Mateo 13:22).

El Caso de Gayo

Juan le escribe a Gayo y le dice: Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma. Pues mucho me regocijé cuando vinieron los hermanos y dieron testimonio de tu verdad, de cómo andas en la verdad. No tengo yo mayor gozo que este, el oír que mis hijos andan en la verdad (3 Juan 2-4).

Aquí tenemos a un tal Gayo, cristiano, y amigo del anciano Juan. A éste, Juan le desea que llegue a ser “prosperado en todo…así como prospera tu alma”. ¿Qué vemos aquí? ¿Nos hemos detenido a usar el cerebro que Dios nos ha dado para reflexionar en estas palabras? ¿Escudriña usted en verdad las Escrituras? Pues bien, acá tenemos a un hombre que prosperaba espiritualmente, que se hacía cada vez más sabio y maduro en la fe…¡pero su prosperidad material estaba estancada, no crecía, no aumentaba, no se hacía patente!  Nótese que Juan no se asombró al ver que la prosperidad material de Gayo no caminaba a la par con su prosperidad espiritual. El jamás creyó que ambas prosperidades (la espiritual y la material) caminarían juntas en un cristiano, y nunca prometió a nadie, y  menos a Gayo, de que serían prosperados en la misma medida, o más, que su crecimiento espiritual. Así que Juan sólo deseó, como un anhelo muy suyo, que Gayo fuese prosperado materialmente, pero no había garantía alguna de que esa bendición material efectivamente ocurriría en un futuro cercano. Finalmente, Juan se alegró de ver que sus hijos en la fe andaban en la verdad, y no en el falso sendero de la riqueza o de la prosperidad material para el presente tiempo.

El Consejo olvidado de Jesús

Nuestro Señor siempre fue cauteloso con el tema de las riquezas, y para él las cosas materiales en exceso siempre eran peligrosas e inseguras. Prácticamente las riquezas eran para él como un obstáculo para el discipulado. Muchos hombres, como aquel joven rico que se entrevistó con Jesús, no pueden acceder al reino de Dios porque para ellos primero son sus riquezas terrenales. Ellos ya viven hoy su paraíso en la tierra, y no necesitan otro mundo maravilloso utópico para el futuro. El énfasis de Jesús en su declaración: “difícilmente entrará un rico al reino de Dios” debería frenar a muchos predicadores a seguir buscando vehementemente las riquezas presentes, pues sin darse cuenta podrían ellos mismos quedar excluidos del reino de Dios. Jesús aconseja a todos los “vividores” del evangelio, lo siguiente:

“Y les dijo: Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee. También les refirió una parábola, diciendo: La heredad de un hombre rico había producido mucho. Y él pensaba dentro de sí, diciendo: ¿Qué haré, porque no tengo dónde guardar mis frutos? Y dijo: Esto haré: derribaré mis graneros, y los edificaré mayores, y allí guardaré todos mis frutos y mis bienes; y diré a mi alma: Alma, muchos bienes tienes guardados para muchos años; repósate, come, bebe, regocíjate. Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será? Así es el que hace para sí tesoro, y no es rico para con Dios (Juan 12:15-21)

¿Es usted Rico para Dios?

Hay personas que son ricas para el mundo, pero no para con Dios. Lo importante es que usted entienda que lo más primordial es llegar a ser ricos para Dios. Y uno se hace rico para Dios cuando uno tiene la RIQUEZA DE LA FE en primer lugar (Santiago 2:5).

Muchos buscan desesperadamente las riquezas presentes porque no tienen la suficiente fe como para aceptar la promesa: “Buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, todo lo demás vendrá por añadidura” (Mateo 6:33). Son justamente los impíos y los carentes de fe los que buscan desesperadamente asegurarse un confort material presente para luego ocuparse de las cosas del reino. ¡Es como darle la carne al diablo y los huesos a Dios! Los verdaderos cristianos NO SE ENREDAN EN LOS NEGOCIOS DE ESTE MUNDO porque es peligroso. Dice así Pablo: Ninguno que milita se enreda en los negocios de la vida, a fin de agradar a aquel que lo tomó por soldado (2 Tim. 2:4). La idea es que no debemos caer entrampados en los negocios de esta vida, ya que nos pueden distraer de la militancia cristiana. Pero si alguien llegó al Señor siendo rico, éste no debe poner su confianza o esperanza en sus riquezas. Básicamente Dios quiere que seamos ricos en buenas obras, y si alguno es rico materialmente, que haga buenas obras con sus bienes, pues así lo dice Pablo con estas palabras:

 “A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos. Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos (1 Tim. 6:17-18).

La Iglesia Laodiceana de los últimos días

Así que la riqueza que ve Dios es la espiritual y no la material. Así se expresó Juan de la iglesia de Esmirna: “Y escribe al ángel de la iglesia en Esmirna: El primero y el postrero, el que estuvo muerto y vivió, dice esto: Yo conozco tus obras, y tu tribulación, y tu pobreza (pero tú eres rico)…(Apo. 2:9). Nótese que la iglesia de Esmirna era pobre materialmente, pero rica para Dios. Esto es lo importante, estimados amigos: La riqueza espiritual a los ojos de nuestro Dios. En cambio, de la iglesia rica de Laodicea, Juan escribe: Y escribe al ángel de la iglesia en Laodicea: He aquí el Amén, el testigo fiel y verdadero, el principio de la creación de Dios, dice esto: Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente! Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi bocaPorque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo (Apo. 3:14-17). Aquí tenemos a la mega iglesia, rica y próspera, llena de lujos y confort, pero que está muerta a los ojos de Dios por su tibieza. Tiene un pie en el infierno y el otro en el cielo, por decirlo de alguna manera. Así que es obvio que los evangelistas de la prosperidad son los predicadores laodiceanos de los últimos tiempos que engañan a las buenas ovejas del Señor a vivir un reino ahora, en confort y riquezas en abundancia. Estos caminan a su perdición, cuando en el juicio final sean sentenciados a la gehenna. “En aquel día le dirán al Señor: Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad” (Mateo 7:22,23). ¿No cae a pelo esta admonición a los evangelistas de la prosperidad que se las pasan haciendo “milagros” y expulsiones de demonios a granel? En el día del juicio, los falsos cristos (“ungidos”) que vienen predicando falsos evangelios, darán cuenta de sus perversidades ante el trono del Juez Supremo…y sentirán por primera vez la horrenda expectación de juicio en su real dimensión…y junto con ellos, los que los apoyaron.

Mientras tanto, los verdaderos y fieles seguidores de Cristo seguirán las pisadas de Pablo (1 Cor. 11:1), que son las mismas pisadas de Cristo. Y Tanto nuestro Señor Jesucristo, como el apóstol Pablo, predicaron a Judíos y gentiles el mismo evangelio salvador del reino (Marcos 1:1,14,15; Hechos 20:24,25; 28:23,30,31). ¿Escuchará usted a Jesús y a Pablo, o les creerá ciegamente a los fraudulentos predicadores de hoy como Carlos Cash Luna,  Rony Chávez, Benny Hinn, Guillermo Maldonado, sólo por citar a algunos de esos pillos? ¡Sólo de usted depende la decisión sabia y correcta!

LOS MAESTROS DEL ENGAÑO-UNA ADVERTENCIA A LA IGLESIA

Por Ingº Mario A Olcese

Amigos míos, Jesús dijo en Mateo 24:4, «Mirad que nadie os engañe.» La palabra engañar se utiliza por lo menos 27 veces en el Nuevo Testamento. Jesús advierte una y otra vez sobre el engaño que caerá sobre la iglesia en los últimos días. Él dice: «Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que, si fuera posible, aun a engañar a los escogidos.» El engaño está en todo el mundo. Está por todo nuestro país y el mundo. Los políticos están engañando y siendo engañados. Desde un punto de vista político, los estadounidenses se engañan todos los días. Es esa la verdad en relación con el panorama político y económico de la nación.

El discernimiento espiritual es aún más raro. Hay tantos cristianos que se sientan en sus bancas en las mañanas de domingo para «marcar» que han asistido a la iglesia. Son los » elegidos congelados».  Luego están en el otro extremo los que abandonan todo sentido de la doctrina y sólo se dedican a temblar, a sacudirse, a gritar, a correr, a caer al piso, a clamar como desaforados, mientras entregan sus diezmos u ofrendas como «dadores alegres» en las «cruzadas evangelísticas», enriqueciendo como tontos a los «ungidos» sátrapas que se presentan como muy devotos y espirituales…¡todo por conseguir que Dios les obre un poderoso milagro de sanidad! Estos predicadores falsos creen que tienen la manija del Espíritu Santo, y de cómo funciona éste. El problema aquí es que la iglesia, en general, carece del equilibrio, y no se le encuentra leyendo y entendiendo la Palabra de Dios.

¿Tiene muchos «cristianos» falta de conocimiento de Dios? Sí! ¿Están éstos con problemas de audición? Sí!  Pues bien, ¿Tenemos realmente que actuar como locos, gritando, saltando, llorando, gimiendo, riendo, etc, para ser considerados llenos del Espíritu Santo en las cruzadas de evangelización? La mayoría respondería con un rotundo, «¡Por supuesto que no!» Sin embargo cientos de miles se dejan engañar a pesar de nuestras advertencias con los espectáculos circenses de las llamadas «cruzadas de evangelización» y suponen que lo que sucede allí es simplemente milagroso, ¡de Dios!  

Otro grupo importante de cristianos supone que haciendo buenas obras, yendo a la iglesia todos los días,  y rezando con el rosario, mañana, tarde y noche, serán bienaventurados. Pero Jesús dice en Mateo 6:7-8, «Pero cuando oréis, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que serán oídos por su palabrería. No seáis, pues, semejantes a ellos; porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidan. «

Pablo advierte en 2 Timoteo 4:3-4, «Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino a sus propias pasiones se amontonarán para sí maestros, teniendo comezón de oír, y se apartarán sus oídos de la la verdad, y se volverán a las fábulas». El engaño puede ser por ignorancia o por el orgullo voluntarioso, pero es un engaño, no obstante.

Pablo escribe en Efesios 4:14, «Para que ya no seamos niños, sacudidos a la deriva, llevados por doquiera de todo viento de doctrina por el juego de los hombres, emplean con astucia, que les acechan para engañar». El camino  infalible para no ser engañado es leer, incluso digerir, las Sagradas Escrituras. No es posible que tremendos viejonazos sean embaucados como infantes, sin tener la capacidad para usar el  discernimiento que Dios les dio. Sin embargo, muchos seguirán en el camino del engaño, creyéndose cualquier cosa que le presenten o prediquen por allí, porque «suena bonito».  Este vicio seguirá su curso en tanto mantengamos una actitud negligente en cuanto al escudriñamiento de las Santas Escrituras. Aquí no se trata de lo bonito que es el mensaje del predicador, ni de cuán inspirador parezca éste en el corazón. Aquí se trata de discernir, con la Palabra revelada, si lo que dice el predicador es realmente escriturario o no. Asi de simple es la cosa. Debemos necesariamente comparar si lo que dice el buenmozo y popular predicador tiene o no asidero bíblico. Pero ojo, habrán predicadores en las tarimas evangélicas que le mostrarán a usted textos bíblicos aislados para probar lo que dicen, pero no leerán todo el contexto. No se olviden de esta máxima: Un texto, sin el contexto, es un pretexto. 

 

LOS FALSOS APOSTOLES Y SUS ADORADOS DIEZMOS

 

 De que la vacuna contra la imbecilidad no se ha inventado, no hay duda alguna, pero seria un gran descubrimiento para combatir la peor y más contagiosa pandemia de la historia de la humanidad, la de la imbecilidad de la dependencia mental, en donde su principal síntoma es creer ciegamente y sin cuestionamientos los Falsos representantes terrenales de Dios. Estos especímenes lamentablemente sí existen, pero sólo para sacar provecho de sus incautos e ignorantes seguidores de estas falsas creencias, principalmente por medio del distorsionado diezmo.

El diezmo, es un retorcido pero eficaz fraude, ya que en su real origen era una institución Judía, que se hacía cada 3 años, tampoco se hacía sólo en dinero, sino que también en especies, y era sólo para sacerdotes levitas, es decir 100% Judíos. La historia de la religión cuenta que la institución del diezmo fue abolida por Cristo, por lo que es difícil entender el porqué todavía se practica, salvo por la realidad terrenal del dinero que está por sobre las creencias que tan fanáticamente profesan la mayoría si no todos los líderes de las iglesias evangélicas, obviamente negando con una sonrisa su rentable y engañoso negocio, tal como cuando el obispo Paulo Roberto gritó: “¡Si usted da, Dios le da!”, después de decir que la crisis mundial no debería servir de pretexto para negar el diezmo o la ofrenda.

Uno de los casos mas polémicos y mediáticos se dio cuando Enrique Vilches Millar, miembro del honorable presbiterio mayor de la Iglesia Metodista Pentecostal de Chile, se alejó de su Iglesia acusando al Obispo y Pastor de la Catedral Evangélica, Javier Vásquez Valencia, de enriquecimiento ilícito, dijo lo siguiente: «En la Iglesia Metodista Pentecostal, el Obispo tiene un poder inconmensurable, gracias a que se ejerce la manipulación afectiva y espiritual de sus miembros. Nadie podría oponerse al obispo, porque se cree que tiene conexión directa con Dios. Por eso, si comete errores, nadie los ve. Los diezmos que recibía Vásquez llegaban a 70 millones de pesos mensuales, ya que no sólo percibía los aportes de los fieles de la Catedral, sino también la décima parte de lo recibido por los más de 50 templos dependientes de la Catedral, y a través del obispado, el diezmo de todo lo recibido por el resto de los templos. Y nada para obras sociales: ningún colegio, ninguna universidad, nada». Estos hechos en el mundo real serían motivo de investigación, juicio y condenas por el delito de apropiación indebida, incluso perfectamente se podrían configurar asociaciones ilícitas por el engaño divino con el que son mantenidos sus fieles, ciegos y serviles seguidores que aparte de histriónicos trances, golpes en el pecho, cánticos fanáticos, sólo reciben de su iglesia el despojo voluntario del diezmo.

La historia de las disputas por el poder dentro de la iglesia evangélica no terminaron con la muerte del obispo Javier Vásquez, al contrario, aumentaron, ya que el pastor presbítero y miembro del tribunal eclesiástico Jorge Vásquez Daza, ante la Muerte de su Padre aseguró ser partidario de un mecanismo de sucesión semejante al usado por las familias reales de «Sucesión Divina» o «Sucesión por Sangre», ¿Linaje Religioso?, ¿Tanto se creerán el Cuento?, bueno como buen ungido Pastor Gobernante del templo evangélico de Maipú, no estuvo fuera de la polémica, cuando su padre fue acusado por el pastor Enrique Vilches de haberse apropiado de miles de diezmos aparte de una subvención de 121 millones de pesos del gobierno de Eduardo Frei, el obispado aseguró que se habían destinado a la construcción de la Catedral de Maipú, pero los problemas legales no han dejado tranquila a esta familia de Iluminados, donde ahora el hijo del Pastor Jorge Vásquez, Aarón Vásquez fue condenado por el Homicidio de Alejandro Inostroza, al cual asesinó con golpes en la cabeza con un Bate de Béisbol, ¿Se le habrá olvidado el 5º Mandamiento?.

Ricardo Cid Castro es otro de estos Pastores Auto iluminados. Ese mismo que hizo «llover» oro en su templo, convocando a varios medios, como se puede ver en el siguiente link http://www.youtube.com/watch?v=L3CX8JJEtYU. También fue destituido de su cargo de presidente del directorio de la iglesia evangélica pentecostal «Impacto de Dios» por actos reñidos con la moral. “Se le encontró teniendo sexo con otro joven de la Iglesia en la casa de mi mamá”, como afirma su propia hermana Sandra Cid, quien también se querelló en contra de su hermano Pastor por apropiación indebida de fondos, injurias y calumnias, y por el delito de lesiones graves. Las lesiones graves corresponden a la toma por la fuerza de un templo por parte de Cid y sus fanáticos seguidores, hechos que se pueden ver en el siguiente link http://www.megavideo.com/?v=1LNHUD92

La querella por apropiación indebida corresponde a diezmos recibidos, y como dice el contador Jorge Guerra, hablan de una cuenta corriente de 8 millones de pesos. “Pero nunca él (Ricardo) me dejó ingresar a los diezmos para saber cuánta plata realmente entraba”, acusa. “Para mí, él se los dejó. Podría calcular unos 20 millones mensuales desde 2001”, por lo menos plata para abogados no le va a faltar.

Alejandro Martínez V. es el más mediático pastor evangélico con canal de TV propio (Vida Visión), conocido porque fue el único interesado “Económico” en comprar el ex estudio gigante, que pertenecía a Mario Kreutsberger (Don Francisco) y sus Socios, el cual el grupo Santander lo tasó en un piso (Mínimo) de US$ 4 Millones (2.165.000 millones de Pesos), dinero que Vida Visión pagó sin problemas de caja, ya que los diezmos recibidos de sus Fieles por este Charlatán le alcanzan para éste y otros “gustitos”. Este Tele gurú ha sido acusado por ex miembros hermanos de su propia Iglesia a los cuales pidió préstamos en dinero para “La Obra”, obviamente que nunca los devolvió. Estos afirman que también habría sido expulsado de su Iglesia por haber golpeado a su mujer y haber tenido una estrecha relación con una chiquilla de la congregación. Quienes han visto el nivel de vida que lleva el pastor, calculan que recauda cerca de 300 millones anuales.

La idoneidad moral de los líderes de las iglesias evangélicas jamás será cuestionada por sus fieles y fanáticos seguidores que los ven como seres divinos. Su fanatismo ciego nubla toda posibilidad de enfrentar la verdadera realidad de su falsa iglesia, para la cual son sólo tontos útiles proveedores de diezmos y ofrendas con las cuales sólo logran hacer más ricos y poderosos a sus falsos líderes religiosos que lucran asquerosamente a costa de la ignorancia, dependencia, oscurantismo o simple imbecilidad de sus fieles seguidores que siguen regalando su dinero a estos estafadores profesionales pensando que el diezmo es la puerta del creyente hacia el pacto de la bendición, y este acto le permite a Dios actuar en sus defectos y bendecirlos; en todos estos casos eso que “Dios Provee” no tiene cabida, pero timar, engañar, embaucar o simplemente robar en nombre de Jesucristo “Si Vale”.

FUENTE
http://www.atinachile.cl/content/view/554599/Los-Falsos-Apostoles-Evangelicos-y-Sus-Adorados-Diezmos.html

REFLEXIÓN SABIA DE UNA CRISTIANA SENSATA SOBRE EL JUICIO A LOS PREDICADORES IMPOSTORES

 

 

Qué verguenza oír el interrogatorio que se le hace a nuestro hermano apologista venido de un pueblo que dice conocer a Dios.

1 – Mi hermano es un hijo de Dios engendrado por el Espíritu de la Palabra, pues su lenguaje no es de hombre, sino de Dios. Romanos 8:14.

2 – Lo que pretende demostrar en su blog no es fama ni poder, sino expandir el evangelio escondido entre los que se pierden, (entre los llamados hijos de Dios) 2ª Corintios 4:1-4.

3 – No te equivoques, todos estamos llamados a ser juez, juez no de apariencias, pero sí de sentimientos y esto es lo que a echo nuestro hermano apologista, a sacado la luz de debajo del almud y la ha puesto sobre el candelero para alumbrar a todos los que moran en tinieblas. (a todos aquellos que se dicen ser cristianos y no lo son) Así que date prisa y haz lo mismo. Saca la Biblia de debajo del brazo y de los altares de los hombres y lleva a cabo el gran milagro del alumbramiento, porque vosotros sois la luz del mundo y si tú no revelas la verdad ¿quién lo hará? Comienza hacer bien tu trabajo, porque ¿qué razón le das a Dios para que juzgue a los que están fuera si tú no eres capaz de juzgar a los que están dentro? Sal de en medio de ellos, porque el pecador no es el que esta fuera, sino el que está dentro. A los que están fuera de la «iglesia» Dios le juzgará, pero los que están contigo, ya están juzgados ¡Así que ahora a juzgar por la Palabra de Dios! Labor de todos y no de algunos.1ªCorintios 5:1-13.

4- Los evangelistas que hacen milagros no son evangelistas, son engañadores, curanderos del cuerpo y no del alma. Ser evangelista es ser un predicador impregnado de la Palabra de Dios, salvado para salvar a otros, porque Dios no cura cuerpos, sin antes haber curado el alma. Procura darte a conocer por la verdad del evangelio, porque Juan el Bautista ninguna señal hizo, pero todo lo que decía acerca de la Palabra de Dios era verdad. Eso es lo que busca mi hermano apologista, FRUTOS DE LABIOS QUE CONFIESEN EL NOMBRE DE JESÚS (predicadores que hablen como Dios y no como hombre)

5 – Hermano querido, mi hermano no tiene envidia de la riqueza de este mundo, pues él es rico en conocimiento y sabe que su salvación vale más que todas las riquezas juntas. Comienza a depositar junto a él, pues la riqueza del espíritu está en el conocimiento de la Palabra de Dios, ahí está tu banco y el mío. Acompañemos a nuestro hermano en su depositario; porque Misericordia quiero dijo Jesús, y no sacrificio, conocimiento más que holocausto ¿porque qué esperanza tenemos de lo que vemos? puedes tener todo lo material, pero si no tienes Palabra de Dios NADA SOS. Ap 3:18 6 – Demos gracias a Dios por nuestro hermano que sin proveer oro, plata ni cobre nos bendice por gracia, pues sabe que su comisión no es pedir algo a cambio por el evangelio. ¿Qué otra manifestación de amor esperamos de su parte? Fil 1.8-11.

María Eugenia.

Breve Comentario de Apologista:

Mil gracias por sus palabras de aliento y apoyo, Hna. María Eugenia, pues percibo que usted ha comprendido mi punto de vista sobre los predicadores sátrapas, y coincide en que mis denuncias tienen un propósito sano y no de destrucción de la fe de mis correligionarios cristianos. Usted ha comprendido que mi labor es la de despertar las conciencias dormidas de muchas hermanos que aún permanecen en las tinieblas espirituales siguiendo a ciegos. Y si un ciego guía a otro ciego, es lógico que ambos caigan en el abismo de la perdición. Sería culpable si sabiendo de las artimañas del error no las expusiera a miles de personas que no tienen la suficiente perspicacia para detectarlas.

Dios la bendiga,

Mario A Olcese (Apologista)

www.yeshuahamashiaj.org