UN GRAN ENGAÑO DISFRAZADO DE LECCIÓN…

 ¡LEA LO QUE ESTE PASTOR HIZO! Y de su opinión
(Imagen Ilustrativa)

El pastor Jeremías Steepek se disfrazó de mendigo y fue a la iglesia de 10 mil miembros donde iba a ser presentado como pastor principal por la mañana. Caminó alrededor de la iglesia por 30 minutos en cuanto ella se llenaba de personas para el culto. Solamente 3 de cada 7 de las 10.000 personas decían «hola» para el mendigo. Para algunas personas, Él les pidió monedas para comprar comida. Nadie en la Iglesia le dio algo. Entró en el templo e intentó sentarse en la parte de adelante, pero los diáconos le pidieron que se sentase en la parte de atrás de templo. Él saludaba a las personas que le devolvían miradas sucias y de desprecio al mirarlo de la cabeza a los pies.

En cuanto estaba sentado en la parte de atrás del templo, escuchó los anuncios del culto y luego en seguida el liderazgo subió al altar y anunciaron que se sentían emocionados en presentar al nuevo pastor de la congregación: «Nos gustaría de presentarles a ustedes al Pastor Jeremías Steepek». Las personas miraron alrededor aplaudiendo con alegría y ansiedad. Fue cuando el hombre sin hogar, el mendigo que se sentaba en los últimos bancos, se colocó en pie y comenzó a caminar por el corredor. Los aplausos pararon. Y todos lo observaban. Él se aproximó al altar y agarró el micrófono. Se contuvo por un momento y dijo:
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“Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí. Entonces los justos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos, o sediento, y te dimos de beber? ¿Y cuándo te vimos forastero, y te recogimos, o desnudo, y te cubrimos? ¿O cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y vinimos a ti? Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis.»
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Después de haber leído el texto de Mateo 25:34-40, Miró a la congregación y les contó todo lo que había pasado aquella mañana. Muchos comenzaron a llorar, muchas cabezas se inclinaron por la vergüenza. El pastor dijo entonces: «Hoy veo una reunión de personas, y no a la Iglesia de Jesucristo. El mundo tiene suficientes personas, pero no hay suficientes discípulos. ¿Cuándo ustedes se convertirán en discípulos?». Luego después, encerró el culto y se despidió: » ¡hasta la semana que viene»!
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Ser cristiano es más que algo que usted defiende. Es algo que se vive y comparte con otras personas.
Celio Machado
Fuente:

DESASTRE DE JAPÓN: ENTIENDE Y PREPÁRATE—CHRIS EVERARD Y MAX IGAN 1/11

El hombre pensó que el libre albedrío concedido a él por su Creador le permite que él realice un golpe de estado en contra del Creador. El objetivo es asumir el Reino divino en la tierra. El hombre impuso un sistema secular en áreas todavía controladas directamente por el Creador. El resultado es un caos completo que el Creador no permite en su Reino. Las señales son enviadas de vez en cuando de modo que el hombre pueda aprender la lección, pero en vano. Japón hoy apela a América, quién lo bombardeó dos veces, para ¡socorro ! La ciencia es el arte humano de utilizar las cosas que el Creador nos proporcionó en la tierra afirmando que éstas son nuestras invenciones. El objetivo es hacer que nuestras vidas entren en un camino muy relajado. Lo que pasa es que algunas gentes son más agresivas que otras. También la ciencia nos distrae del verdadero objetivo de nuestra presencia en este mundo, que nos olvidamos de la vida futura. Esta es una infracción de los derechos del Creador que envía señales de vez en cuando para recordarnos que nosotros sigamos la piedad religiosa.

LA VIUDA DE SAREPTA: EL SALTO DE FE

La viuda de Sarepta atendió, por fe, las necesidades de Elías aun cuando ella estaba al límite de sus recursos; y Dios los bendijo ricamente a ella, a su hijo y a Elías.

LEE: 1 Reyes 17 – Job 38 – 42:5, 6 – Lucas 4:24-28 – Hebreos 11:1 – Apocalipsis 1:17.

 “Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo” (Fil. 1:6).

ELLA CONOCÍA LO QUE ERA LA MUERTE.

Vio morir a su esposo y ahora veía, impotente, como todo a su alrededor moría. El pasto se secó, los árboles dejaron caer sus hojas, las vacas eran apenas esqueletos, y las cabras balaban tristemente. Cada día miraba el cielo sin nubes, esperando, contra toda esperanza, nubes y lluvia. Había racionado la harina y el aceite, tratando de estirarlos hasta el fin de la sequía. Ella partía el panecillo diario en forma desigual: su hijo necesitaba todo el alimento que ella podía darle. Se afligía al ver al muchacho tan delgado y sin energía. Pero su sacrificio parecía inútil; temía que ambos morirían de hambre.

Solo le quedaba lo suficiente como para una comida final. La viuda salió de la aldea de Sarepta a fin de buscar leña para su última comida. Y allí, esta mujer entró en la narración bíblica, donde su relato nos enseña lecciones que podemos, miles de años más tarde, aplicarlas a nosotros. Esta semana veremos el gran conflicto entre Dios y Satanás expuesto en miniatura en la vida de una viuda sin nombre que elige a Dios y es llevada, paso a paso, a una jornada de fe. 

A SAREPTA

Aunque nuestro relato comienza con la orden de ir a Sarepta, dada por Dios al profeta Elías, debemos recordar cómo surgió a esa orden. El reino de Israel había caído en la idolatría. La adoración a Baal era la religión oficial. Dios había “desafiado” dramáticamente al dios de las tormentas declarando, por medio de su profeta Elías, que no habría más rocío ni lluvia (1 Rey. 17:1).

¿Qué ironía surge de que Dios le diga que no habría lluvia, justamente, al reino que adoraba al dios de las tormentas? ¿Qué enseña esto acerca del poder de Dios en nuestro mundo en contraste con todo otro poder? Ver también Salmo 86:8, Jeremías 10:6, Hebreos 1:1 al 3 y Job 38.

Elías se había escondido en el arroyo de Querit (1 Rey. 17:3), mientras la tierra de Israel se marchitaba bajo la devastadora sequía. El arroyo finalmente se secó, y Dios ordenó al profeta ir a Sarepta (1 Rey. 17:1-9). Dios envió a Elías a un país extranjero. Sarepta estaba ubicada sobre la costa del Mar Mediterráneo, entre Tiro y Sidón. De este territorio de Fenicia había venido la terrible reina Jezabel. Uno de los importantes dioses nacionales de Fenicia era Baal, y la esposa del rey Acab importó y fomentó la adoración a Baal en Israel. En el mundo antiguo, se pensaba que los dioses pertenecían a una ciudad o a una región específicas. Sarepta, situada fuera de Israel, parecía estar lejos del área de influencia de Jehová. La gente de esa nación pagana también debía encontrarse lejos del alcance de Dios. Pero, nunca alguien está fuera del alcance de Dios. Allí, en el mismo centro de la adoración a Baal, Dios hizo conocer su presencia y su poder.

Es importante notar que Dios usa la necesidad del profeta para llegar a una mujer en la lejana Sarepta. No necesitamos cubrir nuestros problemas o pretender que no tenemos necesidades, porque todos sabemos que esto no es cierto. Como cristianos, sufrimos y sentimos dolor, y también necesitamos obtener alivio y ayudar a otros, que pueden profesar otra fe diferente de la nuestra, o ninguna.

¿Qué está mal en la actitud de alguien que dice que mostramos falta de fe cuando buscamos la ayuda de otros? ¿De qué manera, por medio de nuestras necesidades, podemos revelar a otros la bondad y el carácter de Dios? 

UN INSTRUMENTO INUSUAL (1 Rey. 17:7-12)

La viuda, que está juntando leña a fin de hacer su última comida para ella y para su hijo, reconoce de inmediato a Elías como un creyente en Dios. El texto no dice qué fue, pero algo le hizo saber, a ella, que Elías adoraba a Dios.

Lee cuidadosamente el versículo 12. La mujer reconoce que Dios existe pero, en ese momento, ¿qué significa eso para ella? Medita en la frase: “para que lo comamos, y nos dejemos morir”. ¿Qué implica esto?

¿Qué semejanzas puedes observar entre 1 Reyes 17:3 y 4, y 17:8 y 9?

Dios guía al profeta Elías a fin de salvarle la vida. Primero le dice que se esconda junto al arroyo de Querit. Los cuervos lo alimentan. Después, Dios le da otra orden y lo envía a Sarepta, donde ha “dado orden allí a una mujer viuda” (vers. 9) que lo alimente.

Ella parece un instrumento inusual de Dios. Es viuda, no es israelita, no tiene posición social, ni influencia, ni poder. Ella misma está a punto de morir de hambre. ¡Qué lección increíble podemos aprender de esta estrategia divina! Con frecuencia, Dios nos escoge no por ser fuertes, sino más bien a pesar de nuestra debilidad (2 Cor. 12:9).

Vimos que Dios no está limitado por la geografía. Dios no está limitado por las limitaciones humanas. Dios es el que da las órdenes. En todo el relato, es claro que Dios está en el control, algo muy importante en el contexto más amplio del ministerio de Elías en la gran batalla entre Jehová y Baal. Nada ni nadie cierra el camino de la voluntad de Dios. Más tarde, en la historia, veremos que ni siquiera la muerte puede interferir con los propósitos de Dios. Las cosas y los acontecimientos pueden herir nuestra vida o ser perjudiciales, pero los propósitos de Dios siempre son buenos (Jer. 29:11), aun cuando no podamos verlo de inmediato. Necesitamos aprender a confiar en Dios en toda situación, buena o mala, porque en algún momento atravesaremos una u otra.

¿De qué manera Dios ha sido capaz de usarte a pesar de tus debilidades? ¿Cuánto más podrías hacer si, por su poder, vencieras esas debilidades?     

Lee 1 Reyes 17:13 al 16. ¿Qué le dice Elías a la viuda, y por qué?

Las viudas eran personajes marginales en el mundo bíblico. Si no tenían hijos que se ocuparan de ellas, eran víctimas fáciles; tenían pocos recursos legales, y era peor en tiempo de sequía. Cada familia luchaba por sobrevivir y no había limosnas para las pobres viudas. El profeta le pide a esta mujer que lo alimente. Ella no es una buena candidata para esto. Solo un puñado de harina y un poco de aceite están entre esta pobre mujer y la muerte por hambre.

¿A quién debe ella alimentar primero? ¿Qué pensamientos debieron haber pasado por su mente cuando oyó el pedido? ¿Qué clase de fe se requería de su parte?

En muchas culturas, es más apropiado ofrecer algo a otros antes que tomar para uno mismo. El profeta no solo le pide a una persona que no puede darle casi nada, sino también pide que lo sirvan primero. Recuerda que el profeta es un representante de Dios ante esta mujer. Al pedirle su última porción de pan, el profeta invita a esta mujer a dar el salto de fe, a entregar a Dios todo lo que tiene.

¿Qué otros ejemplos encuentras, en la Biblia, en los que Dios pide una entrega completa? Por ejemplo, ver Génesis 22.

Cuando damos a Dios todo lo que tenemos, siempre ganamos. La mujer tenía para una sola comida. Al dársela primero al profeta, ella avanzó por fe, confiando en lo que no podía ver ni comprender. Pero ¿acaso no es la fe confiar en un Dios que no podemos ver y en promesas que no comprendemos completamente (Heb. 11:1)? También asombra que no sea una mujer israelita, sino una mujer pagana, rodeada de prácticas religiosas degradantes. Y, no obstante, de algún modo Dios se comunicó con ella (vers. 9), y ella respondió con fe. Hizo lo que se le había ordenado hacer.

¿En qué ocasión confiaste en lo que no podías ver ni entender? ¿Qué lecciones aprendiste acerca de lo que significa vivir por fe? 

RECORDAR MIS INIQUIDADES (1 Rey. 17:17, 18)

La viuda dio su último panecillo, y Dios realizó un milagro. Ella y su hijo escaparon de la muerte por el hambre y tuvieron una fuente constante de alimentos. Es difícil imaginar el asombro que ella debió sentir al ver que ese milagro increíble sucedía día tras día.

¿Cuál es la respuesta humana al estar en contacto con Dios? Job 42:5, 6; Isa. 6:5; Dan. 10:8; Luc. 5:8; Apoc. 1:17. ¿Por qué crees que esa reacción es tan común?

Por medio del profeta Elías, la viuda entra en contacto con Dios. También para nosotros, al entrar en contacto con un Dios santo, nuestros pecados llegan a ser más visibles. Y, cuando algo terrible nos sucede, podemos sentir que Dios nos está castigando. En 1 Reyes 17:18, la viuda culpa al profeta de Dios por estar allí y, en consecuencia, atraer la atención de Dios sobre ella.

Considera el razonamiento de la viuda (vers. 18). ¿Por qué ella habrá pensado de esa manera?

Tal vez ella vio la clase de vida fiel y santa de Elías, y en su presencia se sintió convencida de cuánto contrastaba con él. O, al ver ese milagro, tal vez sintió la presencia de Dios y su santidad, y vio su pecaminosidad como la causa de esta tragedia.

Esta es una reacción muy común. A menudo nos echamos la culpa a nosotros y nuestros pecados por las tragedias que nos hieren. ¿Qué hice para que mi hijo enfermara? ¿Qué pecado causó esta calamidad en mi vida? Es cierto que muchas veces el dolor y el sufrimiento resultan de las elecciones pecaminosas que hacemos, pero también es cierto que otras veces las tragedias vienen sin razón aparente y no por faltas nuestras. Recuerda a Job. Dios admitió que era un hombre justo, y observa qué le pasó. Necesitamos ser muy cuidadosos al querer explicar las causas de una calamidad. Lo más importante es cómo respondemos frente a ella. Obsesionarnos con la supuesta causa no ayuda.

Todos afrontamos tragedias inesperadas e inexplicables. Es parte de lo que significa ser seres caídos en un mundo caído. ¿Cómo puedes aprender a confiar en Dios y amarlo, aun en medio del dolor? 

 FE PUESTA A PRUEBA       

¿Cómo fue probada la fe de la viuda y la de Elías? 1 Rey. 17:17-24.

Nota la lucha que Elías tuvo con la muerte del muchacho. Parece que él no estaba seguro de que Dios lo resucitaría. Su oración parece reflejar alguna de las actitudes de la madre, al echar la culpa a Dios por esa muerte. Aun los profetas pueden luchar con la comprensión de las cosas que suceden (Mat. 11:1-3).

Por un tiempo, tanto la viuda como Elías vivieron viendo un milagro –el suministro continuo de harina y aceite– que debería haber ayudado a mantener firme su fe. Y ahora, con algo tan dramático, su fe es puesta a prueba.

Nosotros también podemos haber tenido una experiencia increíble con Dios, algo que nos haya marcado en forma poderosa, solo para cuestionarlo más tarde cuando surgen eventos que no nos gustan. Por eso, aunque los milagros tienen su lugar en la edificación de la fe, no deberían ser el centro de ella.

¿De qué modo Elías se refiere a Dios? ¿Qué nos indica esto acerca de su relación con él?

Elías tenía una relación muy íntima con Dios; lo llama “Dios mío”. Tener una estrecha relación con Dios no significa que uno tiene todas las respuestas. Elías no entendía por qué Dios había permitido que el niño muriera. Pero, al tener una relación íntima con Dios, podemos experimentar mejor su poder. El milagro no ocurrió por una fórmula mágica o por el intento del profeta de mantener el calor del niño. El texto aclara que fue Dios quien resucitó al muchacho.

Elías mismo está emocionado por el resultado. “Mira, tu hijo vive”, probablemente le gritó a la viuda. Además de lo que este incidente hizo por la fe de la mujer, seguramente también ayudó a Elías.

La respuesta de la viuda termina con una declaración de fe. Ella ahora sabe que el Dios de Israel es capaz de mantener la vida, y de darla.

Lee Lucas 4:24 al 26, donde se menciona otra vez a esta viuda. ¿De qué modo las palabras de Cristo nos ayudan a comprender mejor esta historia? ¿Qué lecciones podemos obtener de ella nosotros, como parte de un grupo privilegiado? 

PARA ESTUDIAR Y MEDITAR: Les dijo: ‘Sin duda me diréis este refrán: Médico, cúrate a ti mismo: de tantas cosas que hemos oído que se han hecho en Capernaum, haz también aquí en tu tierra. Y dijo: De cierto os digo, que ningún profeta es acepto en su propia tierra. Mas en verdad os digo, que muchas viudas había en Israel en los días de Elías, cuando el cielo fue cerrado por tres años y seis meses, que hubo una gran hambre en toda la tierra; pero a ninguna de ellas fue enviado Elías, sino a Sarepta de Sidón, a una mujer viuda. […]’.

Por esta relación de sucesos ocurridos en la vida de los profetas, Jesús hizo frente a las dudas de sus oyentes. A los siervos a quienes Dios había escogido para una obra especial no se les permitió trabajar por la gente de corazón duro e incrédula. Pero, los que tenían corazón para sentir y fe para creer se vieron especialmente favorecidos por las evidencias de su poder mediante los profetas. En los días de Elías, Israel se había apartado de Dios. Se aferraba a sus pecados y rechazaba las amonestaciones del Espíritu enviadas por medio de los mensajeros del Señor. […] El Señor pasó por alto las casas de Israel, y halló refugio para su siervo en una tierra pagana, en la casa de una mujer que no pertenecía al pueblo escogido. Pero ella fue favorecida porque seguía la luz que había recibido, y su corazón estaba abierto para recibir la mayor luz que Dios le enviaba mediante su profeta

PREGUNTAS PARA DIALOGAR:

   1. ¿Cuál es la conexión entre el pecado y el sufrimiento? La viuda de Sarepta pensó que su pecado había causado la muerte de su hijo. En el Nuevo Testamento, los discípulos pensaron que ser ciego era el resultado de los pecados propios o de los padres (Juan 9:2, 3). ¿Deberíamos relacionarnos en forma distinta con personas que sufren como resultado de sus pecados a diferencia de quienes parecen sufrir por otra causa? ¿O no deberíamos emitir siquiera esos juicios? Defiende tu respuesta.

   2. Un niño nace con un desorden genético raro, y la madre siente que Dios la está castigando por su juventud rebelde. ¿Qué consejo y consuelo puedes darle?

   3. ¿Alguien en la clase fue testigo de un milagro que solo pudo venir de Dios? ¿Cuál fue la reacción de la persona? ¿Cuál fue el impacto del milagro en la vida de esa persona? ¿Luchó esa persona otra vez con la duda, a pesar de haber presenciado algo tan asombroso? ¿Qué lecciones podemos aprender de esas experiencias acerca de lo que significa vivir por fe?

UNA LECCIÓN DE SODOMA Y GOMORRA

The Destruction of Sodom and Gomorrah, John Martin, 1852.

Uno de los pasajes bíblicos muy famosos con relación al azufre es la historia de Sodoma y Gomorra encontrada en el Libro de Génesis. «Azufre y sal, abrasada toda su tierra; no será sembrada, ni producirá, ni crecerá en ella hierba alguna” (Deut.29:23).

Qué sucedió en la destrucción de Sodoma y Gomorra? Se sabe que el área comenzó como una región muy fértil (Génesis 13:10), y luego se volvió desolada e infértil, ¿Pero cómo sucedió ese cambio?

El Pentateuco ciertamente describe el proceso de agitación de Sodoma: » Y Dios había llovido en Sodoma y sobre Gomorra azufre y fuego de Dios, del cielo. Él destruyó estas ciudades y toda la llanura, y a todos los habitantes de las ciudades y la vegetación del terreno” (Génesis 19:24). La tora nos dice que azufre y fuego bajaron al mismo tiempo; Sabemos de las propiedades científicas del azufre que de hecho quema debido a su acidez.

La Lluvia ácida

Rashi; (En Génesis 19:24) enseña que lo que cayó sobre Sodoma y Gomorra era en primer lugar lluvia, y sólo entonces azufre y fuego. En tiempos modernos la combinación de estos elementos es una reminiscencia de la lluvia ácida. Mientras el agua se evapora, se combina con aditivos ácidos de los tubos de escapes de los carros, chimeneas de fábricas, y plantas generadoras de carbón durante la formación de la lluvia para hacer la lluvia ácida.

Así que como Sodoma y Gomorra fueron golpeadas con lluvia y luego azufre, experimentamos, en un grado menor, la lluvia ácida causada por la contaminación del medio ambiente. En Escandinavia, por ejemplo, la lluvia ácida ha causado que algunos lagos pierdan a todas sus poblaciones de peces. Mientras que la reparación de este efecto toma lugar naturalmente sobre grandes espacios de tiempo, afecta la comida y el sustento de regiones enteras, y aun puede comprometer la seguridad y salud humana.

El asunto de la lluvia ácida, en la mayoría de los casos, ha decrecido en la zona costera del nordeste de los Estados Unidos y Canadá. Sin embargo, permanece un asunto preocupante en otros países en desarrollo mientras estas economías tratan de imitar el nivel de vida Occidentales, siguiendo los mismos patrones de descuido del ambiente por el desarrollo industrial. Una acción directa a la que podemos inclinarnos para evitar que esto siga ocurriendo es invertir en tecnologías limpias para alentar su uso en los países en desarrollo.

Parece claro que cuánto más nosotros miremos hacia adelante en el uso de combustibles alternativos y fuentes renovables de energía, menos lluvia ácida experimentaremos en el futuro. Quizá esto se podrá lograr porque mostraremos mayor sensibilidad por nuestros congéneres humanos que desafortunadamente no existió en Sodoma y Gomorra.

www.yeshuahamashiaj.org

www.elevangeliodelreino.org

www.apologista.blogdiario.com

LA LECCIÓN QUE OBTENEMOS DEL CENSO DEL REY DAVID

 Prophet David, by Gentile da Fabriano.

El Censo de David

 

1 Crónicas 21:1 “Pero Satanás se levanto contra Israel, e incitó a David a que hiciese censo de Israel. Y dijo David a Joab y a los príncipes del pueblo: Id, haced censo de Israel desde Beerseba hasta Dan, e informadme sobre el número de ellos para que yo lo sepa.”

 

El siguiente mensaje es para desmitificar a nuestros ministros del evangelio de la multiplicación forzada.

 

Partimos de este pasaje y reconociendo primeramente, la verdadera magnitud del ministerio de David, la realeza de su corazón, y todo lo que concierne al dulce cantor de Israel. El haber sido un Hombre de Dios, no quita que se siga siendo un hombre, es por eso que mencione este artículo como “desmitificador”.

 

Dejando de tomar la Palabra en su plano histórico, sino más bien, en su plano Vivo, podemos ver que Satanás se levanta contra Israel, quien es representativo de la Iglesia. ¿De qué forma lo hace? ¿En forma de gigante? ¿En forma de Monstruo? No. Lo hace “incitando” al Rey, o sea que lo estimuló, lo motivó para que hiciese lo que él quería.

Todo lo que se quiera lograr a través del estímulo, la incitación o la motivación no proviene de Dios. Esto es paradójico dado que muchos son los estímulos o las motivaciones que se buscan y se emplean para convencer a nuestros jóvenes de que el evangelio no es aburrido.

 

El evangelio no es estímulo, ni incitación, ni motivación, sino que es convicción. Este es el primer punto a recordar.

¿A qué incito Satanás al Rey? A hacer un censo. Para que supiera el número de habitantes o de fieles que lo seguían, para ver cuánto se había extendido su ministerio. ¿Tenía humanamente de que gloriarse David? Claro que sí. ¿Estaba bien delante de Dios? No.

La gloria es de Dios, cuando la gloria se quiere compartir o robar al Creador se transforma en

Vanagloria.

 

 

Según el Nuevo Diccionario Bíblico los términos “vanidad” y “vano” se hallan frecuentemente en la Biblia, para dar idea de aquello que es vacío, pasajero, sin valor. Dentro de ello caen la idolatría y la maldad, como cosas que no solamente son malas, sino que además son vanas y vacías. También denotan falsedad.

 

Muchos son los ministerios que han largado a la carrera de los censos internos y podemos ver, a la luz de la Palabra de que se trata esta contagiosa práctica.

2 Corintios 10:12 “Porque

no nos atrevemos a contarnos ni a compararnos con algunos que se alaban a si mismos; pero ellos, midiéndose a sí mismos, y comparándose consigo mismos, no son juiciosos. Pero nosotros no nos gloriamos desmedidamente, sino conforme a la regla que Dios nos ha dado por medida, para llegar también hasta vosotros… No nos gloriamos desmedidamente en trabajos ajenos, sino que esperamos que conforme crezca vuestra fe seremos muy engrandecidos entre vosotros, conforme a nuestra regla…”

 

 

¿Qué significa no ser juicioso o no tener juicio? El juicio es una facultad del alma, en cuya virtud el hombre puede diferenciar el bien del mal y lo verdadero de lo falso.

 

Alguien que es juicioso es alguien que tiene precisamente juicio, o que obra con madurez y cordura.

 

Por lo tanto los que se sumergen en esta despiadada batalla de censos, no solo que no pueden diferenciar entre el bien y el mal, no tienen discernimiento, por lo tanto no tienen Espíritu, no pueden diferenciar entre lo Verdadero y lo falso y obran con inmadurez.

 

¿Cómo se crece o como se madura? No con la multiplicación numérica de fieles, sino como dice el pasaje anterior, con el crecimiento de la fe de los fieles.
Si una Iglesia se multiplica pero no crece, es una Iglesia inmadura y por lo tanto se transforma en una blanco fácil para la manipulación, y la consiguiente destrucción.

 

 

Quizás te estés preguntando si es para tanto. Si, es para tanto. Veamos lo que le respondieron a David luego de ordenar su comedido.

 

1 Crónicas 21:3 “Y dijo Joab: Añada Jehová a su pueblo cien veces más, rey señor mío; ¿no son todos siervos de mi señor? ¿

Para qué procura mi señor esto, que será para pecado a Israel?

“¿Estas preocupado por el número? Dios te va a multiplicar pero no mires eso porque no solo es innecesario sino que también atraerá el pecado a tu pueblo” Esa fue la objeción que recibió el rey.

 

 

 

 

Entonces, ¿son necesarios los censos constantes de fieles? No. 2 de Samuel 24:3 dice: “…¿por qué se complace en esto mi señor el rey?”

 

¿Es útil en algo el afán por la multiplicación tanto de fieles como de métodos que estimulen o convenzan a los jóvenes? Para algo es útil, para alimento del ego, del orgullo, de la vanagloria. Debería ser útil para la expansión del evangelio verdadero y puro, pero las cosas se han tergiversado. Los “métodos” han suplantado al “espíritu”.

 

El libro que mejor respalda esto dicho es el libro de Los Hechos. Allí podemos ver como con el Espíritu Santo no hacen falta métodos. Solo se lo tiene o no. Solo se deja fluir. El Espíritu Santo es el que obra cuando hay un corazón dispuesto a abrirse para su dominio total y exclusivo.

 

Veamos también la convicción que tenía Joab respecto de este tema:

 

1 Crónicas 21:6 “Entre estos no fueron contados los levitas, ni los hijos de Benjamín, porque la orden del rey era abominable a Joab.”

Este pasaje termina de dar claridad a todo tipo de duda que quede.

Pero ese no fue el único censo realizado o que podemos encontrar en la Biblia. Claro que no. Podemos encontrar el primer censo en Sinaí (Exodo 38:26); el segundo un año después (Números 1-3); el tercero al entrar a Canaán (Números 26) y el cuarto es el mencionado. ¿Cuál es la diferencia con este? Precisamente el motivo por el cual se realizó. Todos estos censos podemos encontrar que fueron instituidos por Dios. El que hizo David no.

 

Al Señor no le produce nada una Iglesia de millones de personas que no sepan que verdaderamente la Iglesia no es un lugar físico. Todavía hay gente que cree que cuando el Señor venga a buscar a su Iglesia, vendrá a buscar a sus templos con ellos adentro.

 

¿Por qué esta afirmación? Porque la Iglesia dejó de ser hace mucho tiempo un lugar físico o un grupo de fieles estimulados por una palabra de aliento. La Iglesia actual es de un solo miembro. ¿¿Eeh??

 

Veamos:

 

Juan 2:19 “Respondió Jesús y le dijo: Destruid este templo, y en tres días lo levantaré. Dijeron luego los judíos: En cuarenta y seis años fue edificado este templo, ¿y tú en tres días lo levantarás? Mas él hablaba del templo de su cuerpo.”

 

Todo aquel que recibe al Señor recibe al Padre, por lo tanto se transforma en un nuevo templo, ya no de piedra, sino de carne. ¿Puede ser esto verdad, o solo lo estoy interpretando a mi placer?

 

1 Corintios 3:16 “¿No sabéis que sois templo de Dios y que el Espíritu de Dios mora en vosotros? Si alguno destruyere el templo de Dios, Dios le destruirá a él; porque el templo de Dios, el cual sóis vosotros, santo es.”

 

1 Corintios 6:19 “¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros?”

 

¿Alguna duda? Ahora… ¿por qué seguir buscando afuera lo que llevamos dentro? ¿Qué otro templo podemos necesitar si descubrimos el que somos nosotros mismos?

 

Llegando a este punto terminamos de comprobar que de nada sirve y en nada es constructivo perder tiempo en contabilizar la cantidad de fieles que se congregan en nuestros templos. Solo sirve para alimento del ego, del orgullo y de la vanagloria.

 

Eso no termina ahí, dado que luego de ser realizado el censo, en desobediencia a Dios, fueron traídas pestes sobre la tierra por causa del rey.

 

Muchos fueron los muertos. Muchas fueron las perdidas. Hasta que finalmente Dios miro a sus ovejas y se arrepintió del mal causado.

 

Estas pestes y estas mismas muertes hoy están destruyendo muchas Iglesias, muchas personas y una sola es la solución.

 

Medita para finalizar en los siguientes pasajes:

1 Crónicas 21:17 “Y dijo David a Dios: ¿ No soy yo el que hizo contar el pueblo? Yo mismo soy el que pequé, y ciertamente he hecho mal; pero estas ovejas, ¿qué han hecho? Jehová Dios mío, sea ahora tu mano contra mí, y contra la casa de mi padre, y no venga la peste sobre tu pueblo.”
2 Samuel 24:25 “Y edificó allí un altar a Jehová, y sacrificó holocaustos y ofrendas de paz; y Jehová oyó las

suplicas de la tierra, y cesó la plaga en Israel.”

Espero que puedas recibir el mensaje puro de parte de Dios, sin aditivos personales, por eso examina este mensaje a la luz de la Palabra y con guía del Espíritu Santo a toda verdad.

 

 

Fuente:http://lomismodesiempreno.blogspot.com/2007/01/el-censo-de-david.html